Una excelente manera de relajarse antes de dormir es practicar respiración larga y profunda. Sentado cómodamente con las piernas cruzadas, la espalda derecha y los hombros relajados. Las manos con las palmas hacia arriba en el regazo. Cerrar los ojos y relajarse completamente. Respirar lenta y profundamente por la nariz. Permanecer observando la respiración, cómo el aire llena los pulmones, expandiendo el diafragma. Vaciar completamente los pulmones al exhalar. Continuar de 1 a 5 minutos. Después, acostarse sobre el lado derecho y gozar un sueño profundo y reparador.

MODO DE USO:

Se recomienda verter 250 ml de agua recién hervida sobre la bolsita. Déjala durante 5 minutos o más para un sabor más intenso